El amor y la amistad son dos términos que en ocasiones se pueden confundir y dar lugar a sufrimiento y equivocaciones que afectan a la relación entre dos personas.
Aquí vamos a analizar la diferencia entre el amor y la amistad para que puedas identificar los sentimientos que cada uno de nosotros sentimos así como los que otras personas pueden sentir hacia nosotros.
En qué se diferencia la amistad y el amor
La principal diferencia entre la amistad y el amor consiste en que en una relación amorosa ambos amantes pretenden una mayor intimidad y cercanía. Esta unión puede tener su inicio en una atracción física que podemos advertir instantáneamente mientras que una relación de amistad se irá fraguando con el tiempo, según vayamos conociendo y sintiéndonos cómodos con la otra persona.
Otra diferencia consiste en que por lo general una relación de amor implica fidelidad, no se puede o al menos muchas personas consideran que lo natural es tener una única pareja a la vez mientras que una relación de amistad no excluye que podamos tener amistad con otras personas a la vez.
El enamoramiento como hemos visto puede surgir de repente y puede ser que la otra persona no sienta lo mismo por nosotros por lo que para que exista amor no hace falta que éste sea correspondido. Sin embargo no se puede considerar que existe amistad si ese sentimiento no es mutuo entre las dos personas.
Características diferenciadoras del amor y la amistad
El sexo ocupa un lugar destacado en la mayoría de las relaciones amorosas. Los amantes quieren fundirse en uno solo y es en los momentos de unión sexual cuando se da la mayor intimidad que puede darse entre dos enamorados.
Aunque hay casos en los que se mezcla sexo y amistad sin ser pareja la experiencia nos indica que quizás no sea una buena idea mezclar el sexo con la amistad. Son muchas las amistades que se han deteriorado tras una experiencia de este estilo.
Son muchas las parejas que se profesan un intenso amor y dan el paso a convivir bajo un mismo techo. El hecho de pasar mucho tiempo juntos conlleva otros riesgos como son la rutina y las fricciones que llevan aparejada la convivencia. Esto es mucho más infrecuente en la amistad. La amistad no llega a agobiar tanto puesto que la relación no es tan continua y además se suelen compartir más momentos buenos que malos, cosa que a veces no sucede en el caso de las parejas sobre todo cuando tienen hijos y responsabilidades comunes.
Pareja de enamorados por Wyatt Fisher.